Hola! Buen lunes para todos. Acá estamos, recién llegados de vacaciones en la playa y recargados de vitamina D para terminar este inverno (que le queda poco).
Tenerife y sus playas. Un oasis en febrero
Hace un tiempo decidimos que una de las mejores formas de pasar el invierno era haciendo una corta pausa en algún lugar con mejor temperatura. Y he aquí el mejor lugar, no solo para los alemanes, sino también para todos los nórdicos… Las Canarias!!!
Todo empezó en uno de los cursos de bebes que hice con Jule (cuando tenia 8 meses). Ahí conocí a una familia alemana que, lo primero que contaron, fue que en Diciembre se irían a una Isla de las Canarias por tres meses. Ella estaba de baja por maternidad y él trabajaba online. Lo que pensé fue: QUE PLANAZO (como decimos en argentina, un súper plan).
Volví a casa e investigué cómo era el clima en las canarias y porque una familia entera se iba tres meses a “pasar“ el invierno.
Semanas después, nos enteramos que un amigo también se iba a alguna islita en Canarias. También el mismo plan pero en este caso solo 7 semanas.
No se diga más, nos decidimos a hacer vacaciones de febrero en Canarias!!!
Las valijas listas para volver a casa
Nos fuimos y volvimos. Tenerife es lindo y realmente tiene un clima espectacular (tema para otro post).
Hija fascinada con la vista
Otra cosa espectacular es que hablan español, pues es España.
Nunca me sentí tan feliz de vivir una semana rodeada de mi idioma. Levantar el teléfono y hablar automático sin tener que pensar esos milisegundos que vas a decir o como decirlo, es hermoso. Caminar y que los carteles o las publicidades estén en tu idioma. La gente en el bus charlaba en mi idioma y para mi era un poema escuchar todos los chismes que contaban. Me compré un novela en español y mientras leía me di cuenta que hace muchísimo tiempo que no leía algo que no saliera de una pantalla durante horas en español.
Mi cara de felicidad porque entiendo toooodoooo y no tengo que hacer ningún esfuerzo cerebral
Todo fluyó en mi cabeza. Mi cerebro descanso a tal punto que ahora, después de 24hs en Berlin me entró el pánico de „el aleman“. Se fue? Estás ahí? Hallo?
Obvio que estás ahi, tanto esfuerzo no se pierde en una semana, ni en seis. El tema es que cuesta trabajo volver y da mucha flaca (pereza) otra vez a tu cerebro.
Ahora estoy Zúmballe mambo pa' que mi gata prenda lo' motore’, como dice Daddy Yankee (vintage total), Es decir, tapando mi lado hispanoparlante en mi cerebro para despertar el germanito que se tomo las vacaciones.
Zumbándole mambo para que mi gata prenda los motores o mi cerebro
No quiero pensar lo que seria un mes fuera de casa, en un contexto 100% español…
¿Les pasa esto? ¿Alguien tiene algún consejo para que ambos lados en el cerebro convivan en armonía?
En fin, ahora con la radio en aleman a todo volumen, escuchando las noticias y preparando mi lista de actividades de hoy: hacer un llamado administrativo, escribir un par de mails, charlar un poquito con la nueva maestra de Jule y tomar mi curso de costura… todo en alemán.
Buena semana para todos!!!
Patricia
Cuando escribes un nuevo post? Ya tienes trabajo en Berlín? Es difícil?
jajajaj tal cual!! uno siente que se ha olvidado todito